Lo que no puedo ocultar es que me gustas tú, que me da igual el tiempo, que no me importan los sueños embotellados.
Que creo en besos bajo una fría lluvia de verano, en ese momento agridulce. En lo todo lo que tú me transmites en una sola mirada.
Déjame pintarte un corazón con la yema de mis dedos en tu espalda. Como si de un sello se tratase poner mis labios en tu nuca y dejar mi huella en ti, un sello de carmín.
Mis dudas se esfuman en cuanto clavas en mí esos ojos marrones, en cuanto dices con firmeza mi nombre.
Al rato, desapareces y todo me recuerda a ti, vuelven y me inundan las dudas una vez más.
No entiendo bien el porqué de ellas o del miedo a seguir, a lo mejor, lo más probable, sin ti. Sin mi media manzana, sin una simple palabra al desayunar. Siempre me ilusioné demasiado rápido pero esta vez no fue casualidad, esta vez fue es el destino el que quiso jugar con los dos. ¿Dónde estás? ¿Dónde vas? No pregunto en quien piensas, porque eso lo sé ya.
Y así como una veleta vivimos desde que un día cosimos nuestras mitades con una aguja infectada por algo que llaman amor.
Sencillamente, cariño yo te quiero y ambos tenemos un camino por recorrer, ¿juntos? Espero.
Que creo en besos bajo una fría lluvia de verano, en ese momento agridulce. En lo todo lo que tú me transmites en una sola mirada.
Déjame pintarte un corazón con la yema de mis dedos en tu espalda. Como si de un sello se tratase poner mis labios en tu nuca y dejar mi huella en ti, un sello de carmín.

Al rato, desapareces y todo me recuerda a ti, vuelven y me inundan las dudas una vez más.
No entiendo bien el porqué de ellas o del miedo a seguir, a lo mejor, lo más probable, sin ti. Sin mi media manzana, sin una simple palabra al desayunar. Siempre me ilusioné demasiado rápido pero esta vez no fue casualidad, esta vez fue es el destino el que quiso jugar con los dos. ¿Dónde estás? ¿Dónde vas? No pregunto en quien piensas, porque eso lo sé ya.
Y así como una veleta vivimos desde que un día cosimos nuestras mitades con una aguja infectada por algo que llaman amor.
Sencillamente, cariño yo te quiero y ambos tenemos un camino por recorrer, ¿juntos? Espero.