No es un día especial, ni todo es distinto. Tal vez esta sea la normalidad que entiendo ahora mismo.
Vivo al día, atada a un porvenir de problemas y ansiedad. No estás, ni estarás. Y por mucho que este sentimiento vuelva a resurgir en mi interior, no volverás a ser tú. Es un adiós y todo acabó.
Qué misterios encubren tus manos, quiero creerte pero no podría.
Quiero sentir que son sinceras tus miradas, son las 20:14 de un dieciséis de enero. Son los momentos que viviremos juntos, los que fueron y los que serán.
Vivo al día, atada a un porvenir de problemas y ansiedad. No estás, ni estarás. Y por mucho que este sentimiento vuelva a resurgir en mi interior, no volverás a ser tú. Es un adiós y todo acabó.
Qué misterios encubren tus manos, quiero creerte pero no podría.
Quiero sentir que son sinceras tus miradas, son las 20:14 de un dieciséis de enero. Son los momentos que viviremos juntos, los que fueron y los que serán.